Poesía de Cartón: Estrategias para trabajar la poesía en el aula

Raúl Vacas Polo (Rodasviejas, Aldehuela de la Bóveda, Salamanca), licenciado en Ciencias de la Información, poeta, coordina e imparte talleres de escritura creativa y desempeña tareas de edición y de animación y gestión cultural.

En los años 90 publicó Confieso que he fumado, El calor de los labios a solas y El imán de la muerte. En 1999 con Proceso de amor (reeditado por Amarú Ediciones, 2003) obtuvo el Premio de la Academia Castellano-Leonesa de Poesía para Jóvenes Creadores. Posteriormente ha publicado también Consumir preferentemente (Anaya, mayo, 2006), Esto y Eso (Edelvives, col. Alandar, 2010)

En la contraportada de Esto y Eso puede leerse este poema:

Pasa, lector, y ocupa aquí tu asiento,
abre este libro, hojea sus materias,
siente del corazón las cosas serias,
prueba el remedio del conocimiento.

Será la geografía tu alimento,
sangre la nueva historia en tus arterias,
secundarias las fiestas y las ferias,
la biología tu mejor sustento.

Lee cada poema con paciencia,
estudia los idiomas de los besos,
las matemáticas de tu existencia,

y así, cuando conozcas tus excesos
y aprendas a vivir con otra ciencia,
podrás recomendarlo a estos y esos

En breve se publicará Señal, un poemario con imágenes de Sara Morante, en la editorial Mundanalrüido. También aparecerán Uno solo, cuaderno de apuntes con ilustraciones de Aquilino González (Amarú Ediciones) y Niños raros, ilustrado por Tomás Hijo (Editorial SM).

Actualmente dirige, junto a Isabel Castaño, la Escuela de Escritura Creativa de Vacas y Castaño, proyecto didáctico y cultural en el que se desarrollan talleres on-line de creación literaria, de haikús y de microrrelatos. 
En este proyecto ha publicado libros de haikus: Hojas y Jaikulatorias.

El 14 de febrero intervino en el seminario de Secundaria con el taller “Poesía de Cartón".  En él desarrolló propuestas sobre Aprender a mirar, Poesía y magia o Los diferentes envases para la poesía.

Entenderemos que un poema es un juego en sí mismo, una apuesta, un crucigrama para comprender nuestra realidad, un pasatiempo, un cartón de bingo donde hay que prestar atención a cada línea. La poesía y la vida son de cartón. La poesía puede pasar desapercibida, como el mendigo que se cubre con cartones para huir del frío. También la vida, en ocasiones, tiene el mismo valor que los cartones apilados junto al contenedor de reciclaje. (Raúl Vacas)

Realización: jvle